Agencia EFE Lisboa

"Guitarra na Proa", una escultura homenaje a Amália Rodrigues, al fado y a Lisboa de Domingos de Oliveira.EFE/ Nacho Ballesteros
"Huele bien, huele a Lisboa", cantaba la célebre Amália Rodrigues en uno de sus fados más famosos. Cuando pasa un siglo de su nacimiento y dos décadas de su muerte, Lisboa todavía huele a Amália, cuyos pasos se pueden seguir a través de lugares emblemáticos de la capital.
"Guitarra na Proa", una escultura homenaje a Amália Rodrigues, al fado y a Lisboa de Domingos de Oliveira.EFE/ Nacho Ballesteros
Desde la casa donde nació hasta los puntos de homenaje, pasando por el que fue su hogar durante gran parte de su vida, ahora convertido en museo, es posible seguir las huellas de Amália (1920-1999) por Lisboa para conocer la historia y el impacto que tuvo la fadista más célebre de todos los tiempos.